La Penitenciaría Apostólica aprobaba el pasado 20 de marzo la solicitud realizada por la Diócesis de Plasencia para la concesión de la gracia de un Año Jubilar Mariano, con ocasión del III centenario del Santuario de Ntra. Sra. del Puerto en Plasencia, desde el 25 de marzo de 2023 hasta el 25 de marzo de 2024, fechas en las que se podrá conseguir la indulgencia plenaria.
Atendiendo a lo dispuesto en el decreto, desde el 25 de marzo de 2023 hasta el 25 de marzo de 2024, podrán conseguir la indulgencia plenaria los fieles cristianos que, verdaderamente arrepentidos de sus pecados, e impulsados por la caridad, cumplan debidamente las condiciones acostumbradas (confesión sacramental, participación en la eucaristía y comunión, y oración por las intenciones del papa).
Además de esa condición, deberán peregrinar, bien en grupo o individualmente, al santuario de la Virgen del Puerto y participar devotamente en los ritos y celebraciones jubilares.
O los que lo hagan ante una imagen de Ntra. Sra. del Puerto, expuesta a la veneración pública, ya sea en la Catedral, durante su «bajada» o en los distintos templos, parroquias o santuarios, de la Diócesis, que se dediquen de forma personal o cumunitaria, a la oración y a meditaciones piadosas durante un tiempo razonable, que deberá concluir con el Padrenuestro, el Credo e invocaciones a Santa María Virgen.
Los ancianos, enfermos y todos los que por una causa grave no puedan salir de casa, igualmente podrán conseguuir la indulgencia plenaria si, arrepentidos de sus pecados y con la intención de cumplir en cuanto les sea posible las tres condiciones habituales, se unen espiritualmente a las celebraciones jubilares, ofreciendo sus súplicas y dolores, o las dificualtades de la propia vida, a Dios Misericordioso.
Los fieles podrán aplicar la indulgencia a sí mismos o en sufragio por las almas de los fieles en el purgatorio.
Monseñor Ernesto Brotóns, confía en que la “celebración gozosa de este Año Jubilar nos permitirá crecer en el amor y la devoción a la Virgen”, señalando que “será un tiempo propicio para la conversión y la reconciliación con Dios y con nuestros hermanos; para fomentar la comunión y la fraternidad”.
El obispo también invita, en el edicto, a colaborar en la rehabilitación del edificio del comedor de Cáritas de la calle Trujillo.
