Agentes de la Guardia Civil del Equipo de Delitos Tecnológicos (EDITE) de la Unidad Orgánica de Policía Judicial (UOPJ) de la Comandancia de Cáceres, con la colaboración de agentes del Equipo@ de la misma Comandancia, han llevado a cabo la “Operación ATTIS”, una operación que ha finalizado con la detención de dos personas como presuntas autoras de un delito de revelación de los secretos de empresa, relacionado con un taller mecánico situado en una localidad del norte de la provincia de Cáceres.
La investigación se inició el pasado mes de junio, tras la denuncia que presentó ante la Guardia Civil el propietario de un taller mecánico que manifestaba, que autores desconocidos habían accedido sin su consentimiento y con sus claves personales a las páginas web de sus proveedores; habiendo conseguido con ello acceso a sus tarifas de precios, manuales de despiece de la maquinaria (de la que tiene exclusividad de venta y reparación), trabajos de reparaciones y márgenes de ganancia, denunciando, además, accesos ilícitos a la cuenta de correo electrónico empresarial.
Inicialmente la investigación se centró en las personas que trabajaban, o habían trabajado, en las instalaciones del taller y que pudieran haber tenido acceso a su sistema informático, derivando la investigación en torno a una mujer que había estado trabajando en el taller afectado realizando determinadas funciones que le permitían tener acceso a toda la información relacionada con la empresa.
El curso de las investigaciones permitió constatar que el acceso fraudulento al correo electrónico empresarial del denunciante, había sido utilizado para entrar en las cuentas que el taller posee para relacionarse con sus proveedores, averiguando que el fin último de esta actividad ilícita era, supuestamente, la de desviar trabajos de reparaciones de este taller a otro de la competencia situado en la misma localidad
Del análisis en profundidad del equipo informático del denunciante y de los datos de conexión aportados por los proveedores de telefonía, se lograron extraer las direcciones IP de conexión desde donde se habían realizado las conexiones ilícitas, así como otra serie de datos técnicos relativos al dispositivo electrónico que había sido utilizado para realizar dichos accesos.
Finalizada la investigación de los hechos, y con el correspondiente mandamiento judicial expedido por el Juzgado de 1ª Instancia e Instrucción número 3 de Plasencia, se procedió a realizar un registro en el taller mecánico objeto de investigación, analizando y extrayendo las evidencias digitales de los equipos informáticos ubicados en el mismo, las cuales, no sólo confirmaban que los accesos ilícitos a los proveedores y a la cuenta de correo electrónico empresarial del denunciante se había realizado desde dicho taller, sino que, el acceso a dichos proveedores se venía realizando desde, al menos, un año antes de haberse interpuesto la denuncia.
De igual modo, se pudo constatar que la mujer que había estado empleada en taller del denunciante, ahora trabajaba de forma esporádica, en la oficina del taller que estaba siendo objeto de investigación.
Una vez obtenidas las pruebas e indicios necesarios acerca de la comisión de los delitos investigados, se instruyeron las correspondientes diligencias por la presunta comisión de un delito de difusión, revelación o cesión de secretos de empresa, procediéndose a la detención de la mujer, antigua trabajadora en el taller de la persona denunciante quien, tras haber tenido acceso a los datos empresariales de este, habría facilitado los mismos a un taller de la competencia, cuyo responsable también ha sido detenido por, presuntamente, utilizar esos datos en provecho propio, a sabiendas del origen ilícito de los mismos.