Jaime Vega compareció la pasada semana en rueda de prensa, como portavoz del grupo formado por una docena de personas afiliadas al Partido Popular que demandaron en su día al Comité Electoral Provincial del PP y también comparecía como abogado en dicha demanda, ya que la misma ha sido resuelta en primera instancia, con una sentencia desestimatoria a las pretensiones y peticiones que el mencionado grupo de afiliados hizo en su día.
El grupo, que estaba y sigue estando formado por una docena de antiguos militantes, según explicó Jaime Vega, se quejaban de que” no habían tenido ningún tipo de participación en la elaboración de las listas municipales; no se trata de si se ha elegido a una persona u otra, se trata de si esas personas como miembros de un partido político tenían, conforme a lo que dicen sus estatutos, derechos suficientes para elaborar las listas”.
“Sin embargo, continuó el portavoz, se publicó la lista del Partido Popular a nivel municipal con los 18 candidatos que la integraban y, sin embargo, solamente se eligió uno, por tanto, seguimos sin saber quién es el órgano legitimado para haber constituido y haber producido esa lista en relación al resto de los candidatos”.
Dado que los demandantes entendemos en este caso que la sentencia no entra al fondo de la cuestión, continuó Jaime Vega, «y deja por lo tanto imprejuzgados, si están afectados los derechos constitucionalizados en el artículo seis y veintidós de nuestra Carta Magna, lo que haremos, será pedir una aclaración a esa sentencia y posteriormente, recurriremos en apelación, siendo este el motivo de haber convocado esta rueda de prensa.”
Derechos de los miembros de un partido político
“El fondo de la cuestión es, si los militantes de un partido político tienen derechos o no tienen derechos, el fondo de la cuestión, es si tienen que ejercerlos o puede haber alguien por encima, que los ejerza sin tenerlos en cuenta”, remarcaba Vega.
Hizo hincapié en repetir lo mismo, “porque eso es una de las cuestiones que pudimos comprobar y que no sabíamos, no hay ninguna lista elaborada ni por el Comité Electoral local ni por el Comité Electoral Provincial en relación con el resto de los diecisiete candidatos, con lo cual desde nuestro punto de vista hay una quiebra importante en los principios derechos y libertades públicas, que afecta a los miembros de cualquier asociación, en este caso un partido político y que al verse afectados ven como sus derechos los que tienen han sido completamente ninguneados y reducidos a la nada”.
Jaime Vega considera que esto es trascendente, “porque en un sistema como el que vivimos la partitocracia no puede hacer de su capa un sayo y decidir atrapar a través de los órganos que están fuera del estatuto, quienes o no, configuran una lista”.
Y finalizó matizando con rotundidad que ”lo que estamos discutiendo es si queremos una democracia plena o una democracia impuesta, lo que estamos discutiendo es si los miembros de un partido político las bases tienen derechos o no los tienen, si la democracia se crea desde arriba de la cúpula o desde abajo desde la base, y ese es el fondo de la cuestión, lo que me han pedido que transmita y eso es lo que he transmitido brevemente».
Recorrido de la apelación
“Vega respondió a preguntas de la prensa, explicando el recorrido de la apelación de los 12 militantes a esta sentencia y señaló que, la operación primero será vista por el tribunal jerárquicamente superior, que es la Audiencia Provincial, a quien le corresponden en el orden civil ver esa esa apelación y puesto que la otra parte, tendrá derecho a impugnar nuestros motivos, será este tribunal el que decida si tenemos o no tenemos razón. Entiendo que, si nos la dan o no nos la dan, esto llegará al Supremo y será el Tribunal Supremo el que decida estas cuestiones por la índole que están tratando, es decir, es un recorrido largo,
Y con eso también cuenta el aparato de los partidos, porque no es lo mismo enfrentarnos doce militantes a un aparato entero con implantación nacional, a hacerlo en igualdad. Es como luchar contra Goliat, porque no tenemos ni los medios, ni los recursos, pero sí tenemos la determinación, la voluntad y la certeza de que los derechos fundamentales que tiene cada una de las personas que forman este grupo son inalienables y por lo tanto se tienen que defender y se tienen que respetar y si no se respetan de forma automática, hay que luchar por ellos.”