OPINIÓN
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Comunicado del portavoz del Grupo Municipal de Unidas por Navalmoral, Valentín Tomé
En las negociaciones realizadas hace más de un año con el Equipo de Gobierno para la aprobación de los presupuestos municipales, nuestro grupo consideraba prioritario la apuesta por medidas de carácter social y económico que ayudaran a paliar en la medida de las siempre limitadas posibilidades de un Ayuntamiento los efectos más devastadores en el campo de lo material derivados de la crisis pandémica.
Entre muchas de las propuestas realizadas, las cuales fueron dadas a conocer en rueda de prensa en su debido momento, planteábamos la posibilidad de otorgar microcréditos a interés cero desde el Consistorio fundamentalmente dirigidos a los trabajadores autónomos y pequeños empresarios. Conscientes de las limitaciones jurídicas y legales para que una entidad administrativa local pueda ejercer actividades financieras, planteábamos la posibilidad de que estos pequeños créditos fuesen ejecutados bajo la modalidad de subvenciones reintegrables, algo perfectamente compatible con la Ley General de Subvenciones.
Sin duda, además del imperativo constitucional por el que cualquier administración local debe velar por el bienestar económico de su ciudadanía, otro de los grandes impulsos para llevar a cabo esta iniciativa era el propio contexto en el que nos encontramos en relación al mundo financiero, en el que la banca privada, tras la desafortunada desaparición de las Cajas de Ahorro, ha dejado de cumplir con su labor de servicio social. Comisiones abusivas, desertificación bancaria en el rural, desaparición de la atención personalizada, despidos masivos… son algunas de las desgraciadas consecuencias de un modelo de concentración oligopólica que ha reducido y endurecido terriblemente las condiciones del mercado bancario para los usuarios.
Por ello, no podemos más que congratularnos por la puesta en marcha, al fin, de esta propuesta que el Gobierno local ha decidido gestionar a través de la Cámara de Comercio. Dotada con un total de cien mil euros, las cuantías concedidas varían entre los mil y los cinco mil euros a devolver en cómodas cuotas mensuales durante un plazo de tres años, y con el compromiso por parte del beneficiario o beneficiaria de mantener su actividad económica, así como el número de personas contratadas, hasta la finalización del plazo de amortización o hasta la efectiva cancelación de la deuda.
En definitiva, animamos desde nuestro grupo municipal a todos aquellos moralos o moralas necesitados de financiación para poder continuar con sus proyectos empresariales a solicitar estos “Microcréditos Reintegrables”, con la finalidad de mantener vivo un tejido económico que en nuestra ciudad se apoya fundamentalmente en la actividad desarrollada por autónomos y pequeñas empresas.
Valentín Tomé. Portavoz Grupo Municipal de Unidas por Navalmoral
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