El Grupo Municipal Liberales y Moralos, LYM, propone un plan integral para fomentar y proteger el arbolado de Navalmoral de la Mata, basándose en los principios de la Declaración de Utilidad Pública del Árbol en la Ciudad y sus beneficios, una declaración firmada en Barcelona en 1995 a la que desde entonces está adscrito el Ayuntamiento moralo, así como a las recomendaciones de la FAO y los últimos estudios sobre los beneficios prácticos que ofrece un árbol.
Los liberales señalan que, según los estudios, el arbolado es un elemento esencial para las ciudades, al mitigar muchos impactos negativos y hacer más resistentes las ciudades. Y es que el paquete de beneficios que proporcionan los árboles supera en dos o tres veces la inversión que supone su plantación y cuidado.
Los datos al respecto, subrayan los concejales de LYM, son contundentes: el árbol es un regulador del flujo del agua y mejora la calidad del aíre y la salud urbana al poder absorber hasta 150 kg de CO2 al año; filtra contaminantes y partículas en suspensión mientras sus hojas y corteza absorben gases nocivos. En verano, contribuye a enfriar el aire entre 2 y 8 grados Celsius de la ‘isla de calor urbano; de ahí que la correcta plantación de árboles alrededor de los edificios puede reducir la necesidad de aire acondicionado en un 30%, lo que supone un claro ahorro en la factura energética; y lógicamente sirve de alimento y resguardo a la fauna.
En Navalmoral no se cuida el arbolado, «tal y como acreditan las talas y cortas indiscriminadas e impunes de árboles sin expediente administrativo, la pérdida del jardín vertical y las palmeras; el deterioro del Parque Municipal, que ahora será aún mayor al imponernos el muro que traerá el tren; o el frío paisaje lunar que tenemos en la calle García de Paredes que, en verano, permitirá que el calor caiga de plano, sin protección». Especifican los liberales en su comunicado.
Los liberales proponen un plan integral para el arbolado y las zonas verdes y naturales y exigen cumplir la «Declaración del derecho al árbol en la ciudad» firmada en 1995.
Las medidas anunciadas por el Ayuntamiento moralo en el bando dictado el 26 de enero de 2024, les parecen ridículas por escasas, ya que «se limitan a prohibir que se hagan daños, pero no fomenta la ampliación del arbolado y las zonas verdes, ni su integración sostenible en la ciudad, ni contribuye a los objetivos de la FAO, ni permite beneficiarnos de forma natural de un ecosistema urbano sostenible en y planificado».
Los liberales insisten en que «es ridículo, tras comprobar las acciones u omisiones municipales y que pasan por querer suprimir el servicio de jardinería municipal, externalizando la gestión, sin que exista ningún plan integral que vea al municipio y sus elementos como un todo orientados al bienestar común que ofrece una ciudad correctamente diseñada».
Desde LYM apuestan por cuidar, defender y aumentar este patrimonio natural, tan necesario e imprescindible para la salud de las ciudades y sus vecinos, y proponen la elaboración de ese plan integral con la participación activa de todos los Grupos Municipales; «superando así la política del cemento, la motosierra y el arboricidio». Razón esta, por la que piden que, en la elaboración de esa norma general, «el Ayuntamiento sea asesorado por Ángel Mariscal, jefe de Jardinería, una reconocida eminencia en su especialidad».
Para finalizar desde el partido liberal recuerdan a la actual coalición PP-VOX «que dejen de esconder en los cajones las diez mociones propuestas para mejorar la ciudad y de negar el derecho de los vecinos a participar en los asuntos públicos a través de sus legítimos representantes. Es un clamoroso retroceso en los derechos y libertades y vergonzosa puesta en práctica de un autoritarismo que no esconde sino carencias y complejos».
