La agrupación agraria Unión Extremadura, ha informado que actualmente están falleciendo una media de 425 vacas diarias en la comunidad, a consecuencia de la enfermedad hemorrágica epizoótica o del ciervo (EHE) por lo que «si la administración no actúa de manera inmediata en el mes de agosto los ganaderos tendrán una pérdida, solo por las muertes, de alrededor de los 15,60 millones de euros».
Prácticamente toda Extremadura está siendo azotada por la enfermedad hemorrágica, que ataca principalmente a la ganadería bovina y a los cérvidos, y que se transmite por la picadura del mosquito culicoide, notándose mayor virulencia en las comarcas próximas a zonas con existencia de ciervos y corzos.
Ni los ganaderos extremeños ni la economía regional, señalan desde La Unión Extremadura, «se pueden permitir el lujo de perder por esta enfermedad cada día una media de 500.000 €, solo con las muertes; gasto al que hay que añadir los múltiples desinfectantes que los ganaderos se están gastando sin aparente efectividad».
«Si en Extremadura queremos que sigan conviviendo las explotaciones ganaderas con la fauna silvestre, tendremos que encontrar un sistema para poder sanear a la misma ya que si no lo conseguimos, entre la tuberculosis y la enfermedad hemorrágica, vamos a tener que desmantelar las explotaciones ganaderas».
Desde la Unión Extremadura han remitido un escrito a la presidenta de la Junta de Extremadura, María Guardiola, con diversas exigencias al respecto como, el nombramiento inmediato del director general de Agricultura y Ganadería, responsable del Servicio de Sanidad Animal. La confirmación o nuevo nombramiento del Responsable del Servicio de Sanidad Animal. La aprobación de un protocolo de actuaciones tanto en el sector ganadero como en el de la fauna silvestre. La actualización de las indemnizaciones, tanto por animal muerto como para cubrir el lucro cesante. Y finalmente, una línea de ayudas para la adquisición de insecticidas.
