De nuevo agentes de la Guardia Civil, dentro de los servicios que realizan para prevenir la introducción y el consumo de drogas en el Centro Penitenciario de Cáceres, han detenido a un recluso cuando pretendía acceder a dicho centro con 42 pastillas de anfetaminas en el interior de su organismo.
El detenido es un hombre de 33 años que está cumpliendo allí condena y que regresaba tras haber disfrutado unos días de permiso penitenciario, llevando la droga escondida en el interior de su organismo.
Los agentes pertenecientes al Equipo ROCA de la Compañía de Cáceres, y el Equipo Cinológico de la Comandancia, (guía canino y perro especializado en búsqueda de sustancias estupefacientes), identificaron al presunto autor del delito el pasado día 12, en un dispositivo organizado en la entrada de la cárcel de Cáceres, para evitar que se introduzcan sustancias prohibidas en dichas dependencias.
La intuición de los agentes permitió que la perra del Equipo Cinológico efectuara un “marcaje” constante del interno, al no haber encontrado ninguna sustancia entre su vestimenta y sospechando que pudiese llevarlas en el interior de su cuerpo.
Dada la peligrosidad que suponía este hecho para la integridad física del interno, los agentes le trasladaron al Hospital Universitario de Cáceres, donde finalmente se confirmaron las sospechas al constatar la presencia de numerosas pastillas en el interior de su cuerpo.
Tras habérselas extraído, se comprobó que se trataba de un total de 42 pastillas de anfetaminas, razón por la que se instruyeron las correspondientes diligencias por la supuesta comisión de un delito contra la salud pública (tráfico de drogas), y que han sido remitidas al Juzgado de Instrucción, en funciones de Guardia, de Cáceres.
El detenido fue trasladado al centro penitenciario donde ya se encontraba cumpliendo una pena privativa de libertad.
