Agentes de la Guardia Civil, pertenecientes al Grupo de Investigación y Análisis de Tráfico (GIAT), del Subsector de Tráfico de Cáceres (G.I.A.T.), en el marco de la Operación “IBERTACO”, han puesto a disposición judicial al dueño de una empresa de la provincia de Cáceres, investigado por un delito de falsedad documental, tras circular con un camión cuyo tacógrafo había sido manipulado, además de por un delito de defraudación de fluido eléctrico, tras constatar los agentes que dos naves de su empresa se hallaban conectadas, de forma ilícita, a la red de suministro eléctrico.
Los agentes, tras interceptar al camión, comprobaron que llevaba instalado un sofisticado mecanismo electrónico, con la finalidad de alterar los registros del tacógrafo del vehículo pudiendo, entre otras cosas, enmascarar las horas de conducción de dicho vehículo, marcando una actividad distinta a la realmente realizada con el mismo.
En el curso de esta investigación, los agentes se trasladaron hasta la sede una empresa en Cáceres, de la que es titular este conductor. Allí pudieron constatar que dos naves de la mencionada empresa se encontraban conectadas, fraudulentamente, a la red de suministro eléctrico.
Por estos hechos, se ha procedido a la investigación penal del conductor, un hombre de 54 años, que fue puesto a disposición del Juzgado de Primera Instancia e Instrucción, en funciones de Guardia, de Cáceres, por la supuesta comisión de un delito de falsedad documental, consistente en conducir y ser titular de un vehículo con un sistema de manipulación de tacógrafo instalado en el mismo y otro, por un supuesto delito de defraudación del fluido eléctrico, por tener las instalaciones de su empresa conectadas, de forma ilícita, a la red de suministro eléctrico.
La Guardia Civil quiere concienciar que esta práctica fraudulenta del uso de un aparato tacógrafo causa un grave riesgo a la seguridad vial, además de suponer una vulneración de los derechos laborales de sus trabajadores.
